“DIOS DEL VIENTO, DE LA LLUVIA Y DEL SOL”



Cada mañana, cuando amanezca en tu cielo,
regálame, como siempre, tú mi Dios,
la bella sonrisa de tu alma perfecta.
Desnuda mi vida,
cada segundo me entrego a ti,
soy como la tierra enamorada,
de sueños sin fin.



Regálame, otra vez, un rayo de sol,
sin ti, mi cielo no puede ser azul,
y regálame en cada instante, una bella oración,
para amar cada día más, a mi dulce amor.



De mi corazón, brotan hondos suspiros,
y necesito de la faz del cielo, sentir esa bella luz.
Renueva estos corazones llenos de fe,
renuévalos, tú mi Dios, de vida y gozo, con lo que tiene ya que verdear...
Dame de tu viento, dame de tu lluvia, dame de tu sol,
dame de tus valles, de tus ríos y dame de tu mar,
es nuestra mejor riqueza, huyo de un mundo material,
busco más amor,
es mi mayor ambición.
Un rayo de luz y un abrazo tuyo, cada mañana,
un rayo que brille con el grato roce de tu alma.



Cadenas yo no pude, ni puedo romper,
mas regálame en cada aurora, más fuerzas y más valor,
mientras juego entre la hierba de mi niñez,
y hazme sentir, que quien defiende tanta destrucción,
no prosperará su condición.



Quiero un nido lleno de amores,
quiero un canto de ruiseñores,
y brisas que traigan perfumes de un millón de flores.



Quiero niños libres jugando en las praderas,
cantando himnos de victoria,
y conseguir entre todos, romper tan viles cadenas...


Quiero una libertad de vientos, con alas de juventud,
que vuelen por caminos sin guerras, buscando paz.
Quiero un abrazo de niños,
y allá, donde se pelean entre hermanos,que busquen fraternidad.



Quiero una paz que abraza montañas
y acaricia tus cabellos, hacia el final del terror.
Quiero un dulce despertar,
para los que aún permanecen dormidos por el dolor.
Quiero un saludo de sonrisas en la mirada,
observando una victoria en las ruinas de toda prisión.



Cada mañana,cuando amanezca en tu cielo,
regálame, tú mi Dios, la bella sonrisa de tu alma perfecta.
Desnuda mi vida, cada segundo me entrego a ti,
y a veces, te deseo más que a nadie...
Como el niño que ayer fuí,
deseo que me abraces el corazón,
hazme sentir tu alma,
regálame esa flor,
quiero tenerte cada día al alba,
soy como la tierra enamorada,
de sueños sin fin,
quiero ser la flor de tu jardín.
Porque sé, que esa flor tiene tu nombre.
Porque sé, que esa flor tiene tu sangre.
Quiero ser, Dios mío, la flor, la flor de tu jardín.



Autor: (Copyright) Vicente V. Solera.


La tierra es un solo País, y la humanidad sus ciudadanos.
(- Bahá'u'lláh-)




“HOY, COMO MAÑANA, TÚ NO TE MUERES. ESPERANZA.”










Si por las calles de la pobreza,
mientras repican las campanas,
caminan familias, sin casi nada para comer,
y en la vieja plaza de San Pedro,
una voz nos llama y nos quiere reconocer,
para predicar la palabra del profeta al que amo yo.
Entonces, éllos …, no adoran a un mismo Dios.



………………..



Si cuando terminan de rezar …,
y con sus anillos sellados en oro,
caminan por los pasillos de su verdad,
contemplando el gran tesoro
desde la capilla donde los fieles, van a confesar …,
y con un simple amén, luego se sientan en la mesa,
para comerse el gran banquete …
Entonces éllos …, no adoran a un mismo profeta,
éllos se comen el pan que deberían ofrecerte,
y todo sigue igual …
Éllos no adoran al mismo Dios,
que adoras tú y que adoro yo.
Todo es mentira, nada es verdad,
ese no es el mundo soñado, todo eso és, triste falsedad.



………………..



Por caminos corruptos hemos vagado,
y si ha sido sólo por nuestra culpa, no lo podemos saber …
Hemos visto a más de un niño desamparado,
y quien perdió sus valores humanos, no lo quiere reconocer …



………………..



Hemos manchado hasta nuestras uñas, de sangre,
y echamos la culpa,
a más de mil demonios,
dejamos que más de un corazón se desangre,
y aún no comprendemos,
que vagamos a cuestas..., por culpa de nuestros mismos odios …



………………..



Hoy, con el corazón arrepentido,
muchos prenden la luz de un nuevo amanecer,
confiesan todo lo que han sufrido,
pero los ángeles de la muerte, vuelven a vencer.



………………..



Que hoy no derramen más lágrimas,
los que viven con penas y penurias …
Que hoy echen las armas,
a un abismo de basura.
Que hoy se coman a besos,
sin intereses deleitosos de lujurias,
y que se cierre el triste telón ya, de esta vida impura.



………………..



Que hoy el mundo celebre,
el aniversario de la reconciliación,
y vayamos todos …, sin ningún rencor,
a olvidar, que ayer alguién, nos clavó un puñal en el corazón.



………………..



Que hoy, se quemen los trajes y las medallas de la dictadura,
y entierren a los ángeles de la muerte.
Que hoy no se pueda ver desde la atalaya, las tinieblas de la locura,
y que el corazón que sobrevive, sea más …, mucho más fuerte.



………………..



Que hoy quisiera irme contigo, ya sin dolor,
a celebrar el aniversario, de la paz y la libertad universal,
ir todo el mundo, ya sin temor,
a olvidar, que ayer nos quisieron obligar, a odiar la desigualdad …



………………..



Que sea una realidad, ya para siempre,
que el mal y el hambre,
no sea ya, la causa de tanta muerte.



………………..



Hoy, entre los barrotes de mi celda,
y entre las alambradas
que no me dejan atravesar esta bella selva,
antes de que pierda la memoria,
pongo el alma del mal y el corazón del bien, en la balanza,
y prendo fuego a todo lo que fue …,
prefiero vivir, dándole la espalda, a la venganza,
y prendo la llama concebida por la verdadera fe.
En ti, pongo toda confianza,
hoy, como mañana, tú no te mueres. Esperanza.



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Autor:( Copyright)
Vicente V. Solera

“HEREDERO DE TU PROPIO TRIUNFO”





La fuerz
a de un mundo hipócrita y violento,
muchas veces tus alas de libertad quiere romper.

Fuerza de necios, fuerza bruta sin fundamento,
pero pocas, muy pocas veces esta fuerza te puede vencer.



Tú eres un fúlgido de albor.

Tú eres más fuerte y eres el valor.



Brilla esplendorosa dentro de ti,
ansiedad, inquietud,
brillan nuevos amaneceres, tus ganas de vivir,
radiante brilla, la sangre de tu juventud.



Sangre que fluye como las aguas de un manantial,
sobre un río nuevo de pasión.

Sangre que por tus venas no para de arder,
y alma que también se aflige de confusión,
pero de pronto te vuelves a fortalecer.




Tú eres como una estrella,
que en la mañana aún sigue brillando,
y eres en el camino, como una estela,
que siempre luminosa debes seguir caminando.



Tu vida, hoy es más libre que nuestro ayer,
pero hay veces, que andas perdido de un lado para otro,
siempre, siempre hay quien te sabe comprender,

pero tu camino, no …, no es tan maravilloso;




a veces no llegas donde quieres llegar,
pero tienes poderosos recursos para volver a empezar;


y aunque sea insegura tu vida dorada,

debe seguir brillando esa fuerza, en tu mirada;


hoy navegas por el mar de tu futuro dorado,
para que mañana duermas,
bajo la estrella del triunfo de tu pasado.



Brilla un fúlgido de albor, en ti,

la magia de un tiempo que empiezas a sentir.
Ansiedad, inquietud,
vida y ésta virtud,
brilla esplendorosa sobre tus venas,
sangre, la sangre de tu juventud.


Tú eres una esperanza, heredero de tu propio triunfo,
pero el camino que has de caminar es muy duro.
Hay cosas que no se respetan,

y hay puertas que se te cierran.
El destino está vigilante en las alturas,
y la justicia, pocas veces tiene respuestas para tus dudas,
pero tú no nec
esitas alcohol, ni drogas que te aten,
no necesitas armas, ni estimulantes para calmarte,
necesitas brazos y manos que te abracen,
y corazones que no estén marchitándose.



Tú eres una esperanza, heredero de tu propio triunfo,

pero sólo depende de ti, de ti depende nada más.
Grita o llora, cuando te envuelva la tristeza o la soledad,
que tus lamentos se oigan,

y sigue los pasos que conducen a la paz …,
los pasos que conducen a la paz, sólo..., sólo para la paz.






















Autor:( Copyright) Vicente V. Solera

"¿DÓNDE ESTÁS, CORAZÓN?"



A mis pies cae lluvia de luz, en el alba,
besos para mí son, de un nuevo sol redentor,
que van inundando de fuerzas mi alma,
para ayudarme a soportar, gritos de dolor.
¿Dónde estás, corazón.?



Hoy, no me importa perder,
si mañana gano para mis hijos, libertad.
Que corra mi sangre, si sirve para florecer
caminos desiertos de triste tempestad.



Hoy, otra vez,
he bajado hasta el mismo infierno,
y sigo sin comprender,
que el pasado se nos hace eterno.
Qué motivo nos impide despertar,
cansados nos dejan y nos dejan sin respirar...



Y hoy, no me importa destrozarme las manos,
derribando muros, desatando cadenas, rompiendo ladrillos,
recorrer hasta el fin, caminos, mares y pantanos,
sin odiar a los que matan niños
y sin maldecir a los que no respetan, el trabajo de los ancianos,
no me importa destrozarme hoy las manos,
si con ésto,mañana ganaré igualdad, para los míos.
No me importa si me rompo las uñas, si me destrozo las manos,
segando malas hierbas, segando trigo,
si para mañana, gano pan, pan para mis hijos.



De tierra santa vengo,
a tierra santa voy,
acógeme, mi bienamado, acógeme señor,
acógeme otra vez, hoy,
un nuevo peregrino soy.
Ayúdame a soportar, tanta crucifixión...,
sin razón.
¿Dónde estás, corazón.?












Autor:( Copyright) Vicente V. Solera

"SUSURROS"


Cuando vuelva la primavera, frente al mar,
tú y yo, sentiremos el tacto de una nueva flor,
las ansias del deseo van buscando un lugar,
bellezas que existen en esta tierra llena de color.
La mañana me trae, susurros de tu forma de amar,
susurros me dicen que me ofreciste tu corazón.


En nuestros ojos, nuevas sonrisas florecerán,
la paz de las estrellas,
nos traen susurros de amores que volverán,
nos abren luminosas estelas,
por senderos de oscuridad.



Como nubes blancas, será nuestro nido de amor,
las hojas de los árboles, me traen susurros al amanecer,
me dicen que las armas ya no vomitan fuego de terror,
susurros me dicen que, odios y rencores huyen del ayer.


Cuando vuelva la primavera, frente al mar,
tú y yo, sentiremos el tacto de una nueva flor,
la mañana me trae, susurros de tu forma de amar,
lejos de tanto error,
lejos de tanto temor.


En nuestros ojos, nuevas sonrisas florecerán,
crepúsculos nuevos, dibujan en el cielo, colores de paz,
lluvias y vientos me traen, susurros de libertad.



Autor:( Copyright) Vicente V. Solera

"JAMÁS PODRÁN DOBLEGAR A TANTO CORAZÓN"


Hoy, mi corazón,
baja a mis amados valles.

Hoy, quiero ver,
como ayer,
lo que están haciendo
esos heroicos infames.


Hoy, dejo atrás el lugar donde vivo y,
vuelvo a mis viejas calles,

vuelvo a mi pueblo,
el lugar que nunca olvido,
ni con el paso de los años,

quiero estar al lado,
de los hombres, de las mujeres,
de los niños y de los ancianos,

si más cerca no puedo,
sí entrego mi corazón,
a sus manos.

En esta tierra de vándalos,
jamás podrán doblegar a tanto corazón,
a nosotros no nos domina la ira
que provoca el rencor,

ni somos presos
de tanta locura, sin razón.




Nosotros,
siempre volveremos a empezar,

somos las mismas personas que en el ayer,
con esfuerzo y tesón,
construimos un nuevo hogar.

Vosotros nunca podréis
ver un nuevo amanecer,

porque sólo tenéis armas para destruir
y corazón para odiar,

pero en esta tierra que es mi tierra también,
y vosotros queréis corromper,
jamás podrán doblegar a tanto corazón.



Volveremos a construir un nuevo pueblo
y una nueva ciudad,

volveremos a sembrar las semillas
de la reconciliación,

para volver a vivir,
para no dejar de amar.

Vosotros,
ni con fuego, ni con cadenas,
podréis con tanto corazón.




Trabajaremos la misma tierra
que vosotros nunca habéis amado,

sólo tenéis alma para destruir,
vuestro mismo pueblo, habéis destrozado,
sólo tenéis corazón para malherir,
y sois esclavos de vuestra maldita condición,
corazón despiadado,

corazón inhumano.



Pero en esta tierra de vándalos,
jamás podrán doblegar a tanto corazón.
Fabricaremos aliados,
los muros de un nuevo hogar,

nacerán nuevos corazones,
nacerán nuevas ilusiones,
concebiremos nuevos corazones
y otra vida nueva más,

volveremos si es preciso,
volveremos a empezar.

Vosotros nunca podréis,
con tanto corazón que vive para la paz,

vuestra violencia y vuestra deslealtad,
se convertirá al fin, en nuestra libertad.



Hoy, mi corazón,
sube de nuevo a lo más alto de las montañas,
para clavar,

con los hombres, con las mujeres,
con los niños y con los ancianos,

estandartes que jamás podrán doblegar,
una bandera teñida de verde
y otra teñida de blanco,

por nuestro pueblo,
con nuestras manos,

por los que matan, por los que mueren,
en esta tierra de vándalos.




Vosotros sólo sois,
efímera libertad,

esclavos de vuestra maldita condición.
Nosotros construiremos un nuevo pueblo,
una nueva ciudad,

vosotros sois presos de vuestra propia perdición.
En esta tierra de vándalos,
jamás podrán doblegar, a tanto corazón.












Autor:( Copyright) Vicente V. Solera



“HOY ME HE ACERCADO A ESTA TIERRA”















Oh! Infinito y grandioso mundo mío,
que en mi juventud no me importabas tanto,
me mostraba indiferente y frío,
nunca me interesó, ni tu angustia ni tu encanto,
mas hoy por ti, como un desafío,
adecuadas palabras voy buscando.



¡Ay! Mundo mío, que un día para siempre, así tal vez,
como durmiendo y sin dolor, dulcemente te dejaré,
mas hoy, dejo atrás todo este gentío,
pues aunque es agradable sentirlo,
hoy necesito por un momento, apartarme de el;



porque ahora, viejo mundo, quiero dejar de mirarte
como una extraña lejanía,
y encontrarme a solas contigo,
no quiero dejar de admirarte,
y busco tu agradable cercanía,
para ser tu más sincero testigo.



¡Ay! Mundo mío, van pasando las horas perennes del tiempo,
y yo como otros,
veo tu júbilo, pero también tu entristecimiento;



en más de un sueño, he ilusionado incansable,
el fin de tu infelicidad,
pero siento que es inevitable,
hablar de esta triste verdad;



que unos trabajan duro para que otros no sufran,
otros sufren para que unos disfruten de la vida,
y unos mueren sin razón …, para que otros vivan,
y así, así cada día,
la felicidad de algunos
es tristeza para otros,
y lo que son placeres para unos,
para otros son tristes sollozos.



Y quién seguirá dándole un arma a ese niño,
para seguir matándole su libertad,
y quién otra vez con un cuchillo,
partirá en dos el corazón del que quiere vivir y amar;



y quiénes conseguirán redimir,
a esas personas que no pueden vivir en paz,
porque hay quien no sabe vivir,
sin sentirse héroe de una lucha ineficaz;



y quiénes al fin,
podrán impedir,
el triste llanto del sentimiento y el decoro,
de la miseria y el abandono;



y mañana quién otra vez, intentará adueñarse con su potestad,
adueñarse de los derechos,
de los sueños y los deseos,
de algunas personas que sólo quieren vivir entre la sociedad.



¡Oh! Infinito y grandioso mundo mío,
que ayer me mostraba indiferente y frío,
hoy dejo de mirarte como una extraña lejanía,
y busco tu agradable compañía,
para ser tu más sincero testigo.



Hoy me he acercado a esta tierra,
a mi tierra, a tu tierra, a nuestra tierra,
si no a trabajarla con mis manos,
sí a observarla con mi mirada y con el corazón,
sí a conocer a los que dicen ser mis hermanos,
y entregarme en cuerpo y alma, hasta perder la razón.
Pero quién intentará otra vez ,
que el alba no nos bese en nuestros ojos y en nuestra piel.
Que Dios nos salve a todos, de toda …, de toda injusta ley.



Hoy me he acercado a esta tierra.
A mi tierra, a tu tierra... A nuestra tierra.





















Autor: ( Copyright ) Vicente V. Solera.